Regalitos navideños

Hola amiguitos, otra vez aquí después de las fiestas navideñas. Menos mal, ya era hora de volver a la normalidad. De momento he subido unos 3 kilos; con lo que me costo perder los 10 que me sobraban, en unos días de fiestas y comidas abundantes se va todo al garete. ¡Hey, y eso que me escapé de la fiesta de fin de año! Creo que estas fiestas ya no son lo que eran, o yo ya no soy lo que fui; el hecho es que deseaba volver a la normalidad.
Venia de pasar la navidad en Castellón el día 29 con ganas de estar en casa, descansar, dormir en mi cama, ver mi tele y estar en mi ordenador. Debo decir que al viaje no nos llevamos ni al canario, el Sr. Pipi Pipi, ni a la gata, Shanya; pues no había donde tenerlos en Castellón; pero si los dejamos bien aprovisionados de comida y agua. No, no temáis amiguitos, mi gata no es capaz de comerse al canario, es la cosa mas rara que ha parido gata, imaginad que hace un tiempo tuvimos un hámster y ella lo abrigaba en su tripa como si fuera su hijo. Bien, imaginadme abriendo la puerta de casa, pensando que la buena de Shanya correría a mi lado a rozarse entre mis piernas; cuando siento ese penetrante olor que salió de la casa cual bocanada de fuego de un dragón. Se me pusieron los “pelos como escarpias”, me retorcí, di algunas arcadas, ¡Madre mía! La condenada gata; creo yo que en venganza por haberla dejado con Sr. Pipi en casa, había sembrado todo el salón y la terraza de pequeños “Recuerdos de Navidad”. Claro está, bien regados de “Cava gatuno”. Y como será de lista la gata que estaba bien escondida detrás del sofá y no se asomaba ni a la de 3. O sea que lo primero que hice al llegar a casa fue coger la fregona y limpiar toda aquella ráfaga de “lucecitas navideñas”.
Bien, eso me pasa por no ver por los de mi especie. No tuve valor de echarla la bronca, pues al fin y al cabo la pobre Shanya estaba sola.
Bueno amiguitos, creo que esto es lo más reseñable que me a pasado en estos días. No quiero ponerme en plan Luís Aguilé, no es mi estilo, pero espero que hayáis pasado unas felices fiestas, que los Reyes o Papá Noel os hayan traído muchos regalitos, y que este nuevo año sea todo lo que esperáis de él.
Bien, y que cancioncita vamos a incluir en la bitácora? Mientras estaba por Castellón vi algunas bitácoras en las que ponían las típicas canciones de navidad: "Ven a mi casa esta Navidad", Feliz Navidad" y demás villancicos. No voy a hacer lo mismo,además que ya pasaron las fiestas; así que voy a poner una vieja canción de Palito Ortega en plan fiestero: "La Chevecha"; que resume bien los días de excesos y desparrame de estas "Fechas tan señaladas". Mucha bebida, mucha comida y muchas resacas. Pocos son los que se han escapado y menos los que no han ganado unos kilos de más.
Con esto me despido hasta la próxima, no sin antes deciros: Sed buenos, que ya habrá tiempo de ser malos el próximo fin de año. ¡Saludos amiguitos!